El Partido Socialista argentino, 1896-1912: Una historia social y política
Editorial: Ariadna Ediciones
Licencia: Creative Commons (by-nc-nd)
Autor(es): Poy, Lucas
En la mañana invernal del domingo 28 de junio de 1896, poco antes
de las nueve, más de medio centenar de delegados de diferentes agrupaciones
y sociedades gremiales comenzaron a poblar el salón principal del edificio
que el club Vorwärts tenía en la calle Rincón entre la avenida San Juan y la
calle Comercio, en el barrio porteño de Monserrat, para dar comienzo al
congreso constituyente del Partido Socialista argentino. En el escenario se
habían montado “las banderas rojas de las agrupaciones de resistencia y de
los centros políticos; en las paredes laterales, escudos con nombres de
prohombres del socialismo”. Con un poco más de demora, en las galerías
comenzaron a ubicarse también decenas de militantes y simpatizantes, entre
ellos algunas pocas mujeres, alrededor del espacio donde se ubicaban los
delegados, que eran varones en su totalidad. Luego de la designación de una
comisión de poderes, que aprobó las formalidades del caso, y de la lectura de
una serie de telegramas llegados de Tucumán, Dolores y Córdoba, los
delegados constituyeron una mesa directiva, aprobaron los informes de la
comisión revisora de cuentas y se dispusieron a escuchar las palabras de Juan
B. Justo, quien subió al estrado para exponer el proyecto de estatutos del
naciente partido.1
Tal vez desapercibida para buena parte de la opinión pública y de la
población porteña, la reunión que daba comienzo esa mañana estaba sin
embargo destinada a tener una importancia significativa en la historia del
movimiento obrero y de las izquierdas en Argentina. Al anochecer del día
siguiente, luego de dos jornadas de intensa actividad, los delegados eligieron
al comité ejecutivo y dieron por clausurado el congreso cantando el “Himno
de los trabajadores” compuesto por el italiano Filippo Turati. La reunión
coronaba los avances organizativos que habían tenido lugar en los dos años
inmediatamente anteriores, pero también significaba un punto de llegada
para las actividades de diversas agrupaciones que venían desarrollándose
desde comienzos de la década de 1880. Su corolario era la fundación formal
de la fuerza política más antigua de la izquierda argentina —una de las
pioneras de la izquierda de toda América—, que jugaría un papel destacado
en la escena política del país en diferentes momentos de su historia.
Compartir:
Una vez que el usuario haya visto al menos un documento, este fragmento será visible.